T34 Biocontrol®, el mejor agente de control biológico para Fusarium oxysporum f.sp. lactucae
La Junta de Desarrollo de Agricultura y Horticultura (AHDB -Agriculture and Horticulture Development Board) formada por agricultores, granjeros y otros actores de la cadena de suministros del Reino Unido; a través del programa SCEPTRE PLUS tiene como objetivo investigar productos fitosanitarios sostenibles para el control de enfermedades y plagas que afectan a los cultivos de hortalizas y ornamentales
El marchitamiento de la lechuga causado por Fusarium oxysporum sp. provoca grandes pérdidas para los agricultores afectando significativamente los cultivos de lechuga en Reino Unido e Irlanda entre otros países europeos.
La Junta de Desarrollo de Agricultura y Horticultura (AHDB -Agriculture and Horticulture Development Board) formada por agricultores, granjeros y otros actores de la cadena de suministros del Reino Unido; a través del programa SCEPTRE PLUS tiene como objetivo investigar productos fitosanitarios sostenibles para el control de enfermedades y plagas que afectan a los cultivos de hortalizas y ornamentales provocando grandes pérdidas en el ámbito comercial. En último término, el programa busca proporcionar información sobre nuevos usos de materias activas autorizadas como fitosanitarios, para ofrecer nuevas soluciones a los agricultores.
El Warwick Crop Centre, School of Life Sciences, de la Universidad de Warwick, es un centro reconocido internacionalmente para la investigación traslacional en agricultura y horticultura sostenibles que por encargo del programa SCEPTRE plus, llevó a cabo un estudio para poner a prueba tratamientos tanto químicos como biológicos para el control de Fusarium oxysporum sp. en lechuga.
Entre los tratamientos biológicos,T34 Biocontroll® fue el agente de control con mejores resultados.
En el ensayo se cultivaron plantas de lechugas en bloques de turba a las cuales se les añadió compost infestado por Fusarium oxysporum. La inoculación artificial, tanto de las plantas de invernadero como las del túnel de polietileno, garantizó que todas presentaran un alto nivel de enfermedad y síntomas consistentes.
A partir de allí se procedió a la aplicación de los tratamientos. Los químicos fueron aplicados una única vez en el momento del trasplante, mientras que los tratamientos biológicos tuvieron tres aplicaciones distintas; en el momento de la siembra, en el trasplante y siete días después de ser trasplantados.
Para los ensayos en plantas de invernadero hubieron diferencias significativas con los tratamientos, siendo Basamid y T34 Biocontroll® los más efectivos. Ambos redujeron drásticamente la enfermedad.
En los ensayos en túneles de polietileno, fue el químico Basamid el que obtuvo mejores resultados. Pero cabe mencionar que en este caso los tratamientos se llevaron a cabo en muy bajas temperaturas lo cual puede comprometer el control de T34 Biocontrol puesto que reduce su efectividad para colonizar raíces y el desarrollo del microorganismo después del trasplante.
Además, aunque Basamid obtuvo mejores resultados en los cultivos de túnel de polietileno, es importante saber que su uso está permitido únicamente una vez cada tres años por sus efectos nocivos sobre el medio ambiente y la salud. Y en su aplicación en los ensayos en túneles, fue el único tratamiento que presentó fitotoxicidad en las plantas.
El estudio concluye que tres aplicaciones de un tratamiento biológico son mucho más efectivas que una única aplicación de un químico, y además se contribuye a la reducción del impacto ambiental causada por pesticidas químicos.
El T34 Biocontrol fue el tratamiento biológico con mejores resultados para el control de Fusarium en lechuga a pesar de la baja temperatura.
Es un producto que desarrolla las defensas de las plantas, contribuye al uso eficiente de los recursos del suelo, estimula el crecimiento y reestablece el balance natural de las plantas.